El tráfico marítimo afectado por el COVID-19
El mercado internacional funciona de tal forma que cualquier elemento con irregularidades genera una dinámica de reacción en cadena y esto es lo que está sucediendo en estos momentos con el tráfico marítimo mundial. Sin duda, la pandemia del Covid-19 ha venido a afectar de muchas formas la realidad mundial, entre las que se encuentra el actual estado del tráfico marítimo.
Crisis en el comercio internacional
Antes de que la pandemia se presentase en el panorama internacional, ya existía crisis en el ámbito del comercio internacional motivado por conflictos políticos y económicos entre Estados Unidos, Europa y Asia con una encarnizada guerra comercial y los diversos vetos a sus respectivos productos, esta situación ya estaba mermando la economía mundial en aquellos momentos.
Escasez de contenedores
Con la finalidad de dimensionar el impacto real de esta situación, es importante tomar en consideración que el 80% de los bienes comercializados en el mundo se trasladan vía marítima y el 60% de estos bienes transportados por el mar lo hace en contenedores. Por ello, hablar de la escasez de contenedores es igual a hablar de escasez de productos e incremento de sus precios por el aumento desorbitado de los fletes.
Contenedores varados
Pero, ¿por qué de repente los contenedores ya no alcanzan? La realidad es que los contenedores están donde no deben estar, se encuentran varados en puertos de América y Europa, ya que por las restricciones de la pandemia y el cierre de fronteras escalonado no pudieron volver a cargarse con nuevos productos para llevarlos de regreso a Asia y así insertarlos de nuevo en el ciclo logístico de forma sostenible financieramente hablando.
Incrementos en los precios del flete
Para que nos hagamos una idea del incremento de los precios en los fletes, según estimaciones del Banco Interamericano de Desarrollo, en septiembre de 2020, un flete de China a Estados Unidos costaba unos 4000 dólares, un año después, cuesta más de 20,000 dólares.
Interrupción en la fluidez del tráfico
Aunado a lo anterior, se está presentando una interrupción en la fluidez del tráfico marítimo acompañado de un tráfico excesivo por la propia recuperación económica y la alta demanda de productos a nivel mundial, tomemos en consideración que el segundo semestre del año asumió el volumen comercial de prácticamente todo un año.
Problemas de infraestructura y mano de obra
Los problemas preexistentes de infraestructura y la baja mano de obra en los puertos y fuera de ellos agravan aún más la crisis. En China, la temporada de tifones junto con las medidas para el control de la pandemia ha llevado a varios puertos a cancelar operaciones, si tomamos en consideración que 8 de los 10 puertos más activos del mundo están en China, podemos comprender lo delicado de esta situación y la enorme afectación que representa para el comercio mundial.
Encarecimiento de costos logísticos
Así, muchos de los puertos más transitados presentan una congestión de barcos en espera de poder desembarcar sus mercancías con el consecuente encarecimiento de los costos logísticos. Mientras que, en los puertos de Los Ángeles y Long Beach, la puerta de entrada marítima a Estados Unidos, decenas de buques están a la deriva con un aumento promedio de la espera para descargar de hasta 10 días.
Panorama complejo al cierre del año
Con este panorama parece bastante complejo hacer frente a la temporada navideña que es, sin duda, la época de mayor consumo y que resulta clave para fortalecer la golpeada economía mundial. Los especialistas recomiendan no caer en compras de pánico e iniciar las compras navideñas con suficiente tiempo, además, será recomendable revisar nuestros hábitos de consumo para no caer en excesos y preferir el consumo de productos locales o, incluso, hechos a mano.
De forma paralela, es una excelente oportunidad para revisar la dependencia comercial del mundo con respecto a China y procurar una mayor diversificación en este sentido.