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Hábitos saludables al trabajar desde casa, todo un reto.

Hábitos saludables al trabajar desde casa, el trabajar desde casa ha significado múltiples retos y beneficios pero, sobre todo, ha venido a modificar rutinas, hábitos, roles, espacios, horarios y decisiones a la hora de atender nuestra jornada laboral. Como todo lo nuevo, supone un tiempo de reajuste que puede dar la impresión de que nuestra vida está un poco fuera de control. Evidentemente, hemos intentado hacer lo mejor con lo que teníamos a la mano y, cerca de cumplir un año en esta nueva normalidad, queremos aprovechar este artículo para hacer una revisión de ciertos hábitos con el objetivo de reajustar o incorporar mejores prácticas al trabajar desde casa.

Primer hábito: arréglate.

Entendemos que, parte de estar en casa, significa estar cómodo, sin embargo, recordemos que lo que servía antes no necesariamente aplica ahora. Es decir, antes, el ritual de salir de casa y llegar a la oficina con la indumentaria correspondiente estaba muy bien definido y, al llegar a casa, se daba ese momento de utilizar ropa cómoda, como la pijama o el pants. Ese ritual ayudaba a nuestro cerebro a reaccionar de una u otra forma según el momento del día. Actualmente, al pasar todo el día vestidos cómodamente, nuestro cerebro, órgano de costumbres como es, no entiende porqué estamos de vacaciones eternas, por lo que, indudablemente, cuando le exigimos concentración y análisis, entra en conflicto. Recuerda que los estímulos recibidos del exterior y enviados por nuestro cuerpo al cerebro determinan cómo va a reaccionar. Aunado a lo anterior, el factor psicológico y emocional también debe sumarse: vernos en el espejo desarreglados y desaliñados habitualmente no es lo más favorecedor para la autoestima y la motivación.

 

Segundo hábito saludable: respeta los tiempos.

Muy relacionado con lo anterior. El salir de casa y llegar a distintos lugares nos ayudaba a respetar los tiempos de cada cosa: el tiempo del gimnasio, el tiempo del trabajo, el tiempo de convivir con la familia y los amigos, el tiempo para formarnos, no obstante, hoy en día, hemos llegado a hacer todo eso en el mismo espacio: la casa. Por lo que parece que el tiempo es una masa uniforme y pesada que no sabemos cómo manejar y que parece desbordarse sobre nosotros haciéndonos sentir que el día se nos ha escapado sin control. No debemos caer en el error de dedicarle más tiempo al trabajo del que antes le dedicábamos. Recuerda que la productividad no significa pasar más horas trabajando sino invertir menos tiempo logrando mejores y mayores resultados. Así que establece límites temporales y respétalos. Si tienes dificultades la tecnología puede echarte una mano, existen aplicaciones como Brain Focus Productivity Timer que te permite fijar estos límites. Recuerda que la productividad mejora si intercalamos pausas activas de descanso con la realización de una tarea porque nos encontraremos más concentrados, descansados y motivados.

Tercer hábito saludable: Mantente activo

Siempre hemos sabido que la actividad era una rutina necesaria y fundamental para un estilo de vida saludable, pero, hoy, más que nunca es una necesidad vital más que un estilo de vida. Y, con mantenernos activos no nos referimos solamente a practicar deportes y hacer ejercicio exclusivamente, sino a generar, incluso, nuevas formas de trabajo. Por ejemplo, si tienes una reunión informativa con tu jefe, por qué no salir y rendir informe mientras caminas por el parque. Esto ayudará a oxigenar el cerebro y activar la circulación sanguínea volviéndote mucho más eficiente y certero además de mejorar considerablemente tu estado de ánimo. hábitos saludables al trabajar desde casa.

Cuarto hábito saludable: Aliméntate de forma equilibrada

También muy relacionado con el punto anterior. La nueva forma de trabajar parece consumirnos hasta el punto de que, muchas veces, comemos cualquier cosa delante de la computadora y vamos posponiendo la alimentación hasta que ya, de plano, el cuerpo nos reclama por el vacío alimenticio o bien, nos la pasamos picoteando incansablemente todo el día. Recuerda que el alimento es el combustible del cuerpo, así que, si quieres rendir y concentrarte, no te olvides de proporcionar lo necesario para ello. Asimismo, respeta las tres comidas fundamentales y procura que sean siempre en el mismo horario, verás cómo tu cuerpo comienza a funcionar mucho mejor: reduciendo el estrés, la angustia, el insomnio y el sobrepeso al mantener el metabolismo activo y trabajando a buen ritmo.

Quinto hábito saludable: Limita tus redes sociales

El uso del celular ya venía siendo todo un tema de debate en el ámbito de la productividad laboral y, el trabajar desde casa, ha venido a finalizar el debate y proporcionarle un lugar fundamental y prioritario en el universo de herramientas laborales. Sin embargo, también es un arma de doble filo si lo utilizamos para socializar porque esos dos minutos revisando Instagram pueden fácilmente convertirse en 20 minutos y, más allá, del uso temporal, es la desconexión con lo que estábamos haciendo y la ruptura de concentración que representa, pues volver a conectar y enfocarnos nos llevará mínimo otros 10 o 15 minutos. Existen multitud de aplicaciones que te ayudarán a limitar el uso de redes sociales, te recomendamos, por ejemplo, Forest: Stay focused.

 

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